¿Qué nos ocurre?

El 11 de marzo se celebraba el Comité Nacional del PP para analizar los resultados electorales. Convocan a las 5 de la tarde para el mudo de la reunión. Todo normal. Llegamos pronto, claro, para grabar entradas y coger declaraciones. Lo corriente. Pero como es lógico estamos allí todos. Y no se nos ocurre otra cosa que correr de un lado hacia otro, correr hacia el político de turno como locos. Incluso pretendemos hacer un canutazo a Camps ¡en un paso de cebra! Él siguió caminando, no se paró como es lógico en medio de la calzada, y en nuestra locura casi tiramos al suelo a Rita Barberá que lo acompañaba. Y lo mejor es que estábamos en la puerta de la sede en fila, es decir, sólo podían entrar delante de nosotros, sin correr, y además teníamos la llegada en un plano más o menos limpio. Por eso ¿qué nos ocurre? ¿Es que ya no somos capaces de pensar un poco, de facilitarnos nosostros mismos el trabajo?